La idea de esta nota es brindarle al lector, un menú gastronómico variado, para que se pueda deleitar durante el almuerzo o la cena con una exquisita comida. Para ello, El Apodológico se pondrá el delantal de Chef y dará a conocer el origen del sobrenombre de tres futbolistas ,que tienen una relación directa con este tema.
La entrada para esta ocasión es Carlos Lechuga Roa. A continuación, se develará la misteriosa génesis de su apodo. Al ex arquero mundialista con la Selección argentina en Francia ‘98’, le pusieron Lechuga cuando sus compañeros de las divisiones inferiores de Racing, se enteraron de que era vegetariano.
Ahora vamos con el plato principal, El Conejo Javier Saviola. Es interesante lo que El Apodológico descubrió sobre el origen de su seudónimo. El responsable de su Bautismo Sagrado, fue su ex compañero de River, Germán “El Mono” Burgos.
La historia se remontó a uno de los primeros entrenamiento de Saviola en el conjunto Millonario. En una práctica de fútbol, en un mano a mano entre los protagonistas de esta anécdota sucedió esto: Saviola se quedó solo delante de Burgos, pero la pelota era larga; así que el arquero llegó primero y la tocó hacia la izquierda. Después, miró hacia el lado y Saviola no estaba, pero de repente el delantero lo superó por fuera y ya tenía la pelota. Entonces lo observó a Burgos y movió la cabecita de un lado al otro”. Por esta razón, el ex arquero de River y la Selección argentina dijo: “Es un conejo”.
Para finalizar la comida, El Apodológico preparó un delicioso postre: un helado de frutilla a la crema servido en un Cucurucho Walter Silvani. Al ex delantero de River nacido en Mar de las Pampas, lo apoderaron Cucurucho porque a la salida de su escuela, iba con todos sus compañeros a la heladería, pero como él era muy humilde nunca podía comprar un helado. Lo único que comía después de clase, era el cucurucho. Por eso sus amigos lo apodaron así.
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